Durante la reciente Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Lisboa, el Papa Francisco ha resaltado la labor de la Orden de San Juan de Dios en beneficio de los más pobres y ha mencionado a la Orden Hospitalaria como referente y ejemplo por su vocación de Servicio.
La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) es el encuentro de jóvenes de todo el mundo con el Papa. Es, además, una peregrinación, una fiesta de la juventud, una expresión de la Iglesia universal y un fuerte momento de evangelización del mundo juvenil.
Y, en este contexto, es donde el Papa Francisco ha querido resaltar la imagen de nuestro Fundador, en un discurso donde han sobresalido palabras como “caridad”, “juntos” y “fragilidad”.
En este punto es donde ha contado la historia de Juan Ciudad, ante un aforo de más de un millón de jóvenes provenientes de 151 países, y cómo, cuando halló a Jesús “hizo una cosa audaz, fue a la ciudad y se puso a pedir limosna por la calle, diciendo a la gente: «Hermanos, haced bien a vosotros mismos». ¿Entienden? Pedía caridad, y a quienes le daban les decía que, ayudándolo a él, en realidad se ayudaban ante todo a ellos mismos”.
“Hermanos, haced bien a vosotros mismos”, es la frase en la que ha insistido en varias ocasiones, una de ellas para contar por qué, aunque la orden se llame Hermanos Hospitalarios, “algunos empezaron a llamarlos de otro modo, con las palabras que aquel joven repetía a todos, «Hermanos, haced bien». Nosotros en Roma los llamamos así: Fatebenefratelli”.
Numerosos colaboradores de la Orden pudieron ser testigos directos de sus palabras, como por ejemplo la nutrida representación de @joveneshospitalarios que ha participado en el encuentro con el Papa celebrado en Lisboa.